¿Nunca te has
preguntado cómo entró el pecado al mundo? o ¿Cómo entró en tu hogar? El hombre
dio entrada al pecado en el mundo y en su vida por su baja naturaleza, pues es
esta la que nos hace hacer cosas malas y una vez que el pecado entra en
nuestras vidas se posesiona de nuestra voluntad y nos debilita, esta es una
fuerza espiritual diabólica que nos cautiva.
Una de las
consecuencias derivadas de esta condición es ausencia de las justicia de Dios,
porque mientras haya pecado en nosotros no habrá justicia ya que es esta la que
nos da paz para con Dios. Sin embargo, Dios en su infinita misericordia,
estando en esta condición nos justificó por medio de la fe ¿Cómo lo hizo?
Enviando a su hijo amado a la cruz del calvario a morir en nuestro lugar, porque
él no tenía pecado pero murió por nuestro pecado y lo hizo por amor.
Es por esto que no
podemos ser indiferentes al amor de Dios, ante tal sacrificio lo menos que
podemos hacer es entregarnos a él y recibirlo como nuestro único Señor y Salvador.
Él nos abrirá las puertas del cielo y nos llenará de gracia y fe y nos quitará
toda pena y vergüenza de nuestras vidas.
Entonces, ¡Alégrate!
porque él se ha reconciliado contigo; puesto que si estando en pecado él estuvo
dispuesto a perdonarte y fuiste reconciliado con él a través de la cruz ¿cómo dudar de su amor y su misericordia? Nunca
habrá algo tan malo que hayas hecho que no puedas hablarlo con tu Dios,
solamente tienes que poner tu confianza en él, como hijo reconoce tus fallas y acércate
al Señor.
Amigo,
no imaginas el privilegio que Dios te ha dado tan solo de escuchar el mensaje
de salvación y vida eterna, porque si algún día quieres ir al cielo el único
camino es Jesús, no hay otro camino y hoy en día muchas personas aún no han
tenido la oportunidad de conocerlo. Así que dale gracias a Dios por el
privilegio que él te ha dado, mi consejo para ti que estás leyendo estas líneas
es que te apartes del pecado para que así tengas vida eterna y puedas decir “Yo soy de Cristo y Cristo es mío”.
¡Dios te bendiga!
Pastor Richard Rodríguez.
¡Dios te bendiga!
Pastor Richard Rodríguez.