domingo, 31 de agosto de 2014

Amigo, quizás han habido momentos en tu vida en los cuales te has sentido frustrado porque personas a tu alrededor  te han subestimado al no ver en ti la capacidad  para cumplir tus sueños, metas o simplemente  algún objetivo que sea de relevancia;  permíteme hablarte de la historia de un joven en la biblia que por ser apacentador de ovejas no aparentaba tener la capacidad de dirigir a una nación entera,  como lo era David.

Esta historia la encontramos en 1 Samuel 17, el profeta Samuel enviado por Dios, buscaría entre los hijos de Isaí al próximo rey de Israel; altos, bien fornidos, de buen parecer y diestros en la guerra, éstas eran las características de los hijos de Isaí que estaban frente al profeta,  más Dios hablo a su corazón  diciéndole que no se fijara en la apariencia, sino en el corazón. Pero faltaba uno, David,  el cual  estaba detrás de las ovejas de su padre y no cumplía con ninguna de las cualidades que tenían sus hermanos, sin embargo, él fue el elegido y Dios lo promovió llevándolo al trono de Israel como Rey.

Desconozco cuál sea tu condición, tú que estás leyendo este escrito; tal vez sean los complejos, tu manera de verte, las decepciones, las cuales usas como  argumento para que no creer en nada y mucho menos en nadie, pero quiero que sepas que aunque estamos viviendo en un mundo natural, hay un mundo espiritual donde opera Satanás  y cuya intención siempre será dañarte, haciéndote creer que eres poca cosa para realizar los planes que Dios tiene contigo. No permitas que el desprecio de los demás traiga desánimo a tu vida, al contrario, conviértelo en un motivo para demostrar que Dios no se equivocó al escogerte para llevar a cabo su plan.

Muchas veces haremos cosas que no queremos hacer, estaremos en lugares donde no queremos estar y pasaremos por situaciones que nadie quiere pasar, pero cuando estamos en los planes de Dios él puede cambiar, en solo un instante, nuestra vida por completo; llevándonos a un lugar de avance y promoción. Dios tiene el poder para  sacarte de detrás de las ovejas  y ponerte adelante;  Él puede darte elegancia, autoridad, ponerte en alto, darte un nombre respetable y llevarte a un nivel de   excelencia, como lo hizo con David.

El corazón de Dios se abre hoy para decirte que ha llegado tu tiempo de promoción,  los que te aborrecían o te tenían en poco, hoy te buscarán, porque sencillamente Dios se antojó de ti, él quiere llevarte a un nivel superior y darte todo aquello que tiene preparado para ti y mi deseo es animarte a que todo mal comentario de quienes te rodean no afecte tu fe, pues ella te llevará a ver cumplidos cada uno de tus anhelos, porque cuando le crees a Dios, él cambia el destino de tu vida por completo. Amigo, Dios te ama y te pondrá en lo alto, este es tu tiempo de honra, promoción y bendición. Dios hará contigo cosas que no te imaginas ¡Anímate, llegó el tiempo de tu promoción!

Pastor Richard Rodríguez.